Llega septiembre y con él la rutina. Aunque hay quien aprovecha para hacer sus vacaciones cuando la mayoría ha vuelto, y quien ni siquiera ha hecho vacaciones (ejem, ¡hola!), es indudable que la dinámica general nos empuja a regresar a la monotonía y es muy fácil agobiarse antes de tiempo.
Autónomos y vacaciones son tan difíciles de mezclar como el agua y el aceite, y puede ser que la vuelta al cole te atrape sin haber cargado tus baterías al 100%. Además, doy fe que las emprendedoras tenemos tendencia a querer abarcarlo todo nosotras solitas, lo que puede desembocar en un gran estrés.
En este artículo te doy algunos tips para que la rentrée después de vacaciones no se te haga una montaña, y puedas reincorporarte sin perder el ánimo y la alegría. ¿Empezamos?
1. Cambio de chip
Es básico: cambia el enfoque. No pienses en la vuelta como el fin de tus vacaciones, sino como un inicio: una oportunidad.
Después de haber hecho un break, tendrás una visión más fresca y renovada de cómo está marchando tu negocio. Y este es el momento ideal para analizar, evaluar y abordar los cambios que creas necesarios para dar ese paso más allá. ¡La actitud lo es todo!
Quizás es momento de renovar tu identidad corporativa o tu página web, o bien de digitalizar los servicios que hasta ahora ofrecías de manera presencial.
2. Prioridades
Hoy en día recibimos tantos inputs que es facílisimo perder nuestro foco y atención. Y pretender cambiar nuestro negocio de la noche a la mañana is not possible.
Aprender a priorizar va más allá de saber cómo hacer una buena gestión del tiempo. Priorizar significa organizar la propia vida, clarificar valores, recordar qué es importante y qué es mejor postergar o incluso dejar ir.
Imagínate pues un podio con los 3 escalones. ¿A quién vas a otorgar cada una de estas plazas? Puedes elegir tareas, objetivos o propósitos que alumbren e inspiren tu camino. Tener un rumbo fijo te ayudará a economizar esfuerzos, lo que a su vez, te hará sentir más relajada, motivada y productiva a la vuelta de las vacaciones.
Es probable que una de tus prioridades sea tener más tiempo. ¿Sabes que puedo ayudarte en ello? Mira cómo puedes ganar tiempo y fidelizar a tus clientes con los ebooks corporativos editables en Canva.
3. Planificación
Ahora que ya tienes claras tus prioridades y objetivos es momento de coger el calendario. Este es el paso fundamental para pasar a la acción y que nuestros propósitos no queden solamente en ideas mentales.
No hace falta cumplirlos todos el primer mes, ¡tenemos todo un año! Dividir nuestras prioridades en partes nos hace ver nuestros objetivos de una forma más realista y asequible. Por ejemplo, podemos repartir las 3 prioridades de nuestro podio en 3 trimestres. Y a continuación, concentrarnos en cada mes del año y planificarlo siguiendo la misma estrategia: desgranando y minimizando prioridades.
¿Sabías que...?
Este método organizativo puedes aplicarlo a cada ámbito de tu vida y a cualquier tarea relacionada con tu negocio, por ejemplo en la planificación de las redes sociales de tu negocio. Los kits de diseños para Instagram en formato plantilla Canva te ayudarán a alcanzar tus objetivos sin precisar de demasiado tiempo ni conocimiento en marketing.
4. Y en el día a día…
Llega la hora de la verdad, y el momento de conjugar nuestro planning “mental-ideal” con la realidad diaria. Aquí vienen unos últimos consejitos para mejorar la productividad del día a día:
- ¡Orden en la sala! Mantén limpio y ordenado tu entorno de trabajo. Te hará sentir más inspirada, creativa y mejor contigo misma. Si además es un espacio abierto al público ayudará a generar un buen ambiente, mejorará la proyección de tu negocio y la experiencia con tus clientes.
- Cuidado con las distracciones. E-mails, whatsapps, llamadas y notificaciones del móvil son ladrones profesionales de tiempo. Puedes limitar las horas que pasas en tu bandeja de entrada o silenciar el móvil para mantener tu foco.
- Como dice el proverbio chino “Sé fuerte y flexible como el bambú, que se dobla pero no se parte”. Tu planificación y prioridades son un rumbo, no un mandamiento que debas cumplir a raja tabla. Siempre pueden llegar contratiempos, incluso los más inesperados como nos ha pasado con la pandemia. Ser flexible y adaptarnos a los cambios impedirá que te quedes bloqueada y sin saber cómo actuar cuando las cosas no sucedan como esperábamos.
- Cuida de tu alimentación y de tu cuerpo. Respeta tus momentos de descanso, mímate y reserva un hueco para tu deporte o actividad favorita, amigos y familia. ¡Es vital para todo lo demás!
“Sé fuerte y flexible como el bambú, que se dobla pero no se parte”
¿Te animas a poner en práctica estos tips y mejorar tu productividad a la vuelta de las vacaciones?
Si en tus prioridades está mejorar la imagen que proyecta tu negocio, en esto, ¡puedo ayudarte! Cuentamelón.
